Habíamos quedado en el umbo terminado y la rodela cortada.
El entelado fue lo siguiente.
Si bien es cierto que históricamente no se reforzaban los escudos con cola fría y tela de lienzo sino con cuero, es una opción aceptada y bastante realista hacerlo de esta manera. No disponía de un pellejo de cuero crudo para curtir de casi un metro cuadrado.
Lo recomendado es usar tela de lienzo (llamada Creda por quienes fabrican lienzos; también se usa una llamada Osnaburgo o la Arpillera cruda de hilado fino), algunos combinan algunas capas de tela gruesa y la rematan con tela fina... o al revés. No lo entendí muy bien.
Yo usé 3 capas de tela, la primera fue una arpillera fina que me había sobrado de una túnica (nota: la arpillera es muy gruesa para hacer ropa cómoda) y las dos últimas de una cortina que parecía sábana.
¡Las sábanas viejas suelen redimirse formando parte de un escudo nuevo!
¡Que no! No es una mesa, es mi escudo. |
Con los círculos de tela cortados, procedimos a cubrir la madera con cola fría. Usé cola de carpintero... digo, usé MUCHA cola de carpintero. Tuve que comprar dos bolsas de un kilo para terminarlo.
La apliqué con brocha, con un poco de agua para poder esparcirla mejor (¡poco! la cola diluída pierde resistencia)
Una abundante capa de cola, una capa de tela...
Mi tela gruesa estaba arrugada (uno no suele preocuparse de los excedentes de materiales)... y las arrugas crean globitos... y los globitos se ven mal. Házte un favor a tí y a tu escudo y plancha las telas antes xD
Pegué los bordes al reverso con abundante cola, uno a uno. Creo que pegarlos todos a la vez costaría más.
El agujero del centro se corta al final. No es necesario cubrirlo con cola en esta etapa
Cuando estén listas las capas de tela (cuantas quieras ponerle... bien vale una sola también), repasar los bordes por el reverso y dejarlo secar.
Ya seco, corté el centro y dejé pestañas que doblaran hacia adentro para no dejar madera descubierta, y empecé a trabajar por el reverso.
La cola seca rápido al sol, pero los bordes estaban aún frescos; aproveché de apretarlos bien para eliminar burbujas y añadí un poco más de cola. De ahí no se movieron más.
Apliqué cola al borde del círculo central para pegar ahí las pestañas. Cola para la tela también. ¡Cola para todos!
Las pestañas las fui pegando una a una con abundante pegamento. De otra manera se levantaban... resultaron ser muy conflictivas...
Pero la batalla terminó con la aplicación de grapas. Un tiro y se acabó la resistencia.
Como mencioné antes, apliqué una capa de tela encolada también por la cara interior, sellando los pliegues de los bordes y de las pestañas. No me quedaba suficiente, así que utilicé retazos de lo que me sobraba... ¡Y ni se nota!
El borde interior del círculo es el lugar donde estará la mano, de ahí la importancia de amortiguar bien esa zona.
Cuando terminamos de entelar, se deja secar al sol idealmente un día entero. A sombra secará igual, pero más lento.
Luego de eso se pinta.
La verdad es que me gustó el color de la tela cruda (no era un blanco radiante), por lo que lo dejé así. Sólo le pinté un entrenzado de tres cabos, pero eso fue al final.
Seco y duro todo el entelado, terminé también el asa que iría por detrás.
Siguiendo las referencias antes mencionadas le añadí un asa de metal que surcaba todo el diámetro del escudo, con intención de que sirviera de refuerzo. La otra opción era hacerla de madera... pero pensé "¡pamplinas! de madera no durará; lo hare de metal"
Se veía bien. El problema era el peso... no tuve como pesarlo exactamente, pero era exageradamente pesado... ¡Y quería añadirle una cruceta de refuerzos por delante!
A los dos días de secado, empezaron a aparecer los globitos... ¡Malditas burbujas que estropean mi escudo! |
Pensar en reforzar los cantos con metal era una locura también. El refuerzo de metal está bien cuando el escudo está hecho de tablas, porque lo necesita. Si es de una sola plancha de madera, puede prescindir de ellos.
En general el combate con armas de hierro (esgrima histórica) como espadas, hachas o lanzas, suelen tener rigurosas reglas de seguridad, entre ellas el uso de armas sin filo. ¡No vas a matar a nadie! ¿vale?, por tanto el escudo no va a tener que preocuparse por un hacha danesa cortadora de cabezas.
Los refuerzos quedarán fuera.
Y el asa de metal también... conseguí un listón de 3x1 pulgadas de pino cepillado y le hice un rebaje en el centro para que se empuñara más cómodamente. Quedó así:
En este punto (algo así como el quinto día de "trabajo") conseguí los necesarios pernos con cabeza redonda. Eran un poco más gruesos por lo que debí agrandar los agujeros. 8mm.
También tuve que lijarlos para sacarles la pintura negra y unos números que traía en la cabeza.
El único problema que sigo teniendo es que las tuercas sobresalen demasiado. El interior del escudo tiene seis protuberancias que molestan la muñeca al embrazarlo... las cubrí con cuero para que no hirieran, pero molestan un montón. Si puedes usar tuercas pequeñas o pernos delgados, mejor.
----Actualización Diciembre 2013----
Definitivamente eran muy molestas y peligrosas las tuercas sobresalientes. Lo que hice fue quitar las golillas y avellanar la base de las tuercas. Avellanar implica hacer un rebaje en el exterior del orificio en la madera por la que pasa el perno, de manera que la tuerca pueda calzar y entrar más profundo en la madera, dejando menos de sí que sobresalga y moleste al manipular.
--------Fin Actualización -------------
Con el umbo y el mango en su sitio, pinté finalmente la trenza triple que quería para mi escudo. No entraré en detalle de las horas y horas de dibujo y pintado del diseño.
Se recomienda pintura acrílica o en spray para pintar el escudo. Yo usé pintura para telas que tenía hace tiempo, resiste al agua y forma una película engomada bastante resistente. Espero que resista los cortes con espadas y hachas...
La última fase fue reforzar los cantos con cuero crudo.
En una entrada anterior relaté mis experiencias con el cuero recién sacado del animal, con pelo y todo. Bastó cortar en tiras los pellejos para tener el último material.
Las tiras (irregulares, por cierto) las corté de un ancho que me permitiera doblarlas sobre los cantos y clavarlas a ambos lados del escudo (cara interna y externa). Presentándolas una vez cortadas para calcular la cantidad necesaria, conté 8 para la circunferencia completa. Tenían unos 5 o 6 cm de ancho.
El cuero crudo es trabajable únicamente después de remojado, de preferencia húmedo (no estilando obviamente), pues cuando está seco endurece drásticamente.
Fui doblando cada tira en el canto del escudo y clavándola a ambos lados, a tramos regulares para que los clavos no desentonaran tanto. Usé puntas (clavos con cabeza muy pequeña) de un largo justo para que no atravesaran hacia el otro lado.
Clavé primero el inicio y el final en ambos lados, y luego fui añadiendo más clavos donde se levantase el cuero, siempre tensándolo lo más posible.
En las uniones preferí dejarlas muy juntas pero no traslaparlas una sobre la otra... pensé que se vería mejor así. Pequeño error.
Una vez seco, el cuero encoje y se pliega sobre sí mismo. Cualquier punta suelta se encorvará, y las junturas se separarán. Las uniones de mis tiras se separan ahora por medio centímetro.
Y continué así hasta completarlo.
¡No dejes que el cuero seque antes de clavarlo! Perderá elasticidad y dificultará el manejo enormemente.
Así cubrí finalmente las tuercas por el interior. Me quedó una sin cubrir porque se me acabó el cuero xD
Estas tuercas molestan tanto para embrazarlo normalmente como para llevarlo colgado a la espalda...
Y bueno, eso es todo
Lo siguiente fue cargar orgullosamente mi nuevo escudo al parque y sacarle unas buenas fotos
Absolute epicness
>:)
Simplemete, genial!! Muy bien logrado el escudo, listo para la batalla
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